tradicional
🔒 1. Función principal
- Cerco eléctrico:
Su principal objetivo es disuadir e impedir intrusiones mediante pulsos eléctricos y alarmas. Es parte de un sistema de seguridad activa. - Cerco tradicional (rejas, muros, mallas):
Actúa como una barrera física pasiva. Impide el paso, pero no detecta ni alerta si alguien lo escala o corta.
⚡ 2. Nivel de protección
- Cerco eléctrico:
Ofrece una respuesta inmediata al intento de ingreso: da una descarga no letal y puede activar una alarma. - Cerco tradicional:
Puede ser escalado o cortado sin generar ningún tipo de alerta o reacción.
🧠 3. Efecto disuasivo
- Cerco eléctrico:
Su presencia advierte y desmotiva a los intrusos. La señalización obligatoria refuerza su efecto psicológico. - Cerco tradicional:
Puede ser una barrera visual, pero en muchos casos no intimida ni impide la intrusión real.
⚙️ 4. Mantenimiento y tecnología
- Cerco eléctrico:
Requiere revisiones periódicas, batería de respaldo, energizador y monitoreo en algunos casos. Usa tecnología activa. - Cerco tradicional:
Tiene bajo mantenimiento, pero no evoluciona ni se adapta a nuevas amenazas.
💰 5. Costo e inversión
- Cerco eléctrico:
Tiene un costo inicial mayor, pero es una inversión en seguridad efectiva, ideal para zonas vulnerables o de alto riesgo. - Cerco tradicional:
Generalmente más económico, pero puede requerir refuerzos adicionales si no es suficiente para detener intrusiones.
✅ Conclusión:
Si buscas prevención activa, detección inmediata y disuasión real, el cerco eléctrico es la mejor opción.
El cerco tradicional puede complementar la seguridad, pero no reemplaza la efectividad de un sistema eléctrico moderno.